Un testigo de las acusaciones de fraude electoral de Donald Trump en Michigan se volvió viral después de que su testimonio provocara algunas risas en la sala. Melissa Carone dijo que los funcionarios electorales en Detroit contaron las mismas papeletas hasta 10 veces. El congresista Steven Johnson dijo que esto produciría una mayor discrepancia entre el libro de votación y el número de votos contados, lo cual no es el caso. El juez Timothy Kenny desestimó el caso y concluyó que el testimonio de la Sra. Carone "simplemente no era creíble".